El 28 de febrero de 1986 se celebró por primera vez la festividad del Día de Andalucía, aunque en el corazón de todos resonaban los ecos de aquel 4 de diciembre de tan triste recuerdo, especialmente para los malagueños. Aunque nos suene a nostalgia, a muy lejano, no podemos olvidar que nuestros primeras tareas consistieron en confeccionar banderas andaluzas, aprender nuestro himno, nuestra historia, conocer a andaluces célebres. Hoy en día, en cada acto, los alumnos cantan el himno andaluz sin necesidad de mirar la letra en un papel.
Como anécdota, podríamos contar que la primera vez que enviamos cartas solicitando material, relativo a Andalucía y sus pueblos, nos dirigimos a 50 ayuntamientos andaluces. Todas las cartas llevaban el mismo texto, pero sólo contestaron 14. Hoy tenemos un aula dedicada exclusivamente para el tema de Cultura Andaluza, con una pequeña biblioteca sobre nuestra tierra, murales e información recabada de diferentes organismos. Material que está a disposición de toda la comunidad educativa y que hasta el día de su jubilación e incluso, colaborando con el colegio después de su retiro, se ha encargado de mantener nuestra querida maestra
En muchos pueblos y ciudades se decoran los balcones, donde se cuelga la bandera de Andalucía de las rejas de esta, y se celebran concursos de patios andaluces, entre otros.[2]
En los colegios el 28 de febrero no es lectivo pero durante el día anterior es conmemorado con la toma de un desayuno andaluz, generalmente a base de pan con aceite de oliva, se realizan varias actividades tanto a nivel de aula como de centro y se canta el Himno de Andalucía.
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